Utiliza el producto sobre el fogón del tamaño más adecuado para evitar que se dañe o sobrecaliente.
En el caso de placas vitrocerámicas o de inducción, no utilices la función de apagado automático. Si falla, el agua del hervidor podría evaporarse completamente y causar daños por sobrecalentamiento.
Si el asa de tu hervidor es plegable, asegúrate de colocarla firmemente en posición vertical antes de poner el hervidor sobre una fuente de calor para evitar su posible sobrecalentamiento.
Cierra la tapa bien para proteger el asa del vapor.
Asegúrate siempre de que la boquilla y las muescas de la tapa no apunten directamente hacia ti u otras personas.
No permitas que el contenido del hervidor hierva hasta evaporarse, ya que se producirá un sobrecalentamiento rápido.
Recuerda apagar la fuente de calor en cuanto el agua comience a hervir y retirar el hervidor de dicha fuente de calor.
¿Has hervido agua? Espera de 10 a 15 segundos antes retirar el hervidor de la fuente de calor y, a continuación, viértelo. Nunca pongas el hervidor bocabajo. Asegúrate de que el pomo de la tapa esté bien apretado.
Deja que el hervidor se enfríe del todo antes de volver a llenarlo de agua fría.