Hay un motivo por el que los bistrós parisinos están salpicados de tonos rojos. El color es clásico y encantador y su aspecto ha perdurado durante generaciones. Perfeccionado por nuestros maestros esmaltadores, el rojo duradero de Cerise rinde homenaje a la herencia francesa de Le Creuset. Evoca los ricos vinos aciruelados del Ródano y las cestas llenas de jugosas cerezas de color rubí.

El enfoque de diseño de Le Creuset ha producido algunos de los tonos más buscados del mundo, que a menudo convierten el menaje de Le Creuset en potentes declaraciones de estilo y preciadas colecciones. No es de extrañar que Cerise sea una pieza favorita en la paleta de colores de Le Creuset: su intenso rojo degradado brilla positivamente con profundidad, invitando a los amantes de la buena cocina a darse un capricho, experimentar y disfrutar.

Inspirada en la inimitable pasión por la vida de Francia, Cerise capta perfectamente la alegría del compañerismo, ya sea el ritual del café compartido por la mañana o conversando con los seres queridos al fresco con una copa de vino.